Llega la Navidad y con ella dos plantas que pueden ser tóxicas para nuestros peludos: el Muérdago y la Flor de Navidad o Poinsettia. 

En este artículo aprenderás a identificar los principales signos de intoxicación que producen estas plantas y qué hacer en el caso que tu mascota se haya intoxicado.

Poinsettia

Tóxica para: Gatos, Perros, Caballos, Pájaros

Nivel de toxicidad: leve

Signos frecuentes que podemos observar:

• Babeo
• Labios hinchados
• Piel irritada (enrojecimiento, hinchazón, picor)
• Vómitos
• Diarreas

Durante la Navidad, la Poinsettia o Flor de Navidad (Euphorbia pulcherrima) adorna de forma frecuente las calles y nuestros hogares. Esta planta, pese a recibir duras críticas en referencia a su toxicidad en nuestras mascotas, no es tan tóxica como dicen y no hay evidencia científica que lo demuestre. La savia lechosa que se encuentra en el interior de esta planta contiene unas sustancias nocivas: ésteres de euphorbol diterpenoide y saponinas.

Cuando éstas se ingieren producen signos digestivos leves, como babeo y vómitos, y raramente diarreas. Si la savia lechosa contacta con la piel y mucosas puede producir eritema, hinchazón y picor. Si contacta con los ojos puede producir conjuntivitis leve. Normalmente estos signos clínicos son auto limitantes y no suelen requerir tratamiento médico a menos que no desaparezcan por sí solos o sean severos. No existe ningún antídoto.

Muérdago

Tóxica para: Gatos y Perros

Nivel de toxicidad: moderado

Signos frecuentes que podemos observar:

• Babeo
• Vómitos
• Diarrea
• Dolor abdominal
• Hipotensión
• Arritmias
• Ataxia
• Colapso
• Convulsiones
• Muerte

Existen dos tipos de muérdago que pueden ser tóxicos para nuestras mascotas: Phoradendron serotinum (variedad Americana) y Viscum album (variedad Europea). Desgraciadamente, la variedad europea es la más tóxicas de las dos.

Las ballas de esta planta contienen polisacáridos, alcaloides y lectinas, sustancias nocivas que interfieren y dañan la salud de nuestros peludos. Cuando nuestras mascotas ingieren esta planta de forma accidental, se suelen producir signos digestivos leves-moderados. En los casos en los que se ingiere en grandes cantidades pueden producirse arritmias en el corazón, colapso, hipotensión, ataxia (observamos a nuestro animal caminar como si estuviese borracho), convulsiones y muerte.

Para mayor seguridad, nuestro consejo es que mantengáis el muérdago fuera del alcance de vuestros perros y gatos durante estas Navidades. Si sospechas que tu animal haya podido comer esta planta, contáctanos lo antes posible.

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